martes, 14 de julio de 2015

8 beneficios de que tu casa sea tu oficina

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Diversos estudios aseguran que el trabajo en casa logra una mayor motivación por parte de los trabajadores y un nivel mucho más bajo de interrupciones, lo que termina en un porcentaje más alto de concentración y por lo tanto, mayor productividad en todos los sentidos.

2. Aquí trabajas por metas, no por horarios

Como debería ser en todos lados, en todo caso.
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@leticiadlf

3. Puedes compatibilizar de mejor manera vida laboral y familiar

Uno de los grandes problemas de los extensos horarios de trabajo, además de la productividad y el efecto en la calidad de vida de las personas en varios ámbitos, es la baja posibilidad de complementar el trabajo con el tiempo de calidad que se pasa en familia. El trabajar desde la casa, da una evidente posibilidad de conciliar de mejor manera estos dos ámbitos.

4. Ganas tiempo

El hecho de no tener que desplazarte a ningún lugar físico de trabajo, conlleva un evidente ahorro de tiempo y, obviamente, de dinero. 
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5. Te alimentas mejor

Las opciones de alimentación saludables en las oficinas muchas veces son reducidas, debido a sus altos costos, a la dificultad de transporte (en el caso de llevar de la casa) y a la dificultad y cantidad de tiempo de preparación. Estando en casa, se tiene un acceso mucho más amplio y una conciencia mayor a la hora de alimentarse.

6. Tú eliges tu oficina

Generalmente se recomienda tener un lugar específico de la casa destinado al trabajo, sin embargo, eso no quita el hecho de poder decorarlo y acomodarlo libremente según los gustos y necesidades del trabajador, lo que muchas veces es difícil en una oficina. También existe la libertad de poder romper la rutina trabajando a veces desde la playa, un rico café, y por qué no desde la cama algunos días. 
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7. Puedes organizarte como quieras

Si tienes trámites que hacer o quieres tomarte un día para alargar el fin de semana, no es necesario pedírselo a nadie, sino que puedes organizarte en la medida en que el trabajo esté completo cuando tú lo necesites. Además, en casa hay veces que no nos molesta para nada trabajar horas extras.

8. Estás más cómodo

Tu casa, tus reglas. Aquí no hay ningún código de vestimenta que seguir y tampoco reglas de ningún tipo que condicionen tus acciones diarias, y eso es un real lujo hoy en día.

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